31.8.05

El Calendario de escritores: por qué

Al calendario personal que me traería algún orden y repararía mi flaca memoria fui agregando los nombres de los escritores que más quiero y varios días relacionados con ellos: de nacimiento, de creación, de publicación, imaginarios y, más tarde, fechas que se relacionaban con otros escritores paralelos, contiguos, desconocidos y, así, de lector interesado en algunos datos biográficos, pasé a esa categoría —a ese insomnio—, castigada por Efrén Hernández, de “simple anotador de fechas de nacimiento de autores”. Podé, entonces, la rama literaria de mi calendario personal: busqué endurecer los datos; interrogar a los autores imprescindibles, enriquecer el repertorio y, contra mi gusto inicial, dejar únicamente las fechas de nacimiento, omitiendo pseudónimos, géneros y un útil, pero abultado índice alfabético. La poda fue larga, ricamente asistida por las ediciones del Diccionario de escritores mexicanos de Aurora M. Ocampo, publicadas por la Universidad Nacional Autónoma de México; las páginas de internet Literary Calendar Reference Portal, de P. Timothy Ervin, y New General Catalogue of Old Books & Authors, de Philip Harper, así como por el ordenamiento cronológico que hace la Enciclopedia Británica. Estas fueron mis fuentes primarias, serias, confiables. Habrían de seguir antologías, enciclopedias, biografías, semblanzas, prólogos, cronologías, efemérides, almanaques, calendarios (como el de escritores mexicanos 1989, de Plaza y Valdés), solapas, agendas (como la del escritor), diarios, retratos, revistas, catálogos editoriales, bibliografías y fichas catalográficas de muy diversas bibliotecas tangibles y virtuales. En 2022 me serví, asimismo, de Facebook. El calendario solo recibiría escritores de ficción. Sin embargo, en el camino anché la manga para no dejar fuera a María Moliner, Fassbinder, Palladio, Jerry Seinfeld, Droysen, Elvis Costello, Marx, Toynbee… de modo que, si no están todos los que son (y, así estén algunos, acaso no lo sean), se hallarán no, single, best y long-sellers (Fuentes), a quienes escriben sin pensar, piensan para escribir o escriben porque han pensado (Schopenhauer), además de actrices, ingenieros, teólogos, raperos, exploradores, sacerdotes, arqueólogos, soldados, musicólogos, geógrafos, pintores que han tratado de explicarse el mundo mediante —también— la escritura. El resultado, una compilación exhausta, acaso también un cuidadoso juguete para la onomástica literaria o para admirar la forma en que ciertos días se acomodan a determinados géneros (cuál será el mes de la poesía, de la historia, de los libros de viajes), a los premios o a nuestra dicha como lectores (qué día, mes, año elegir en retirada hacia la isla); días avaros, desaforados, mansos, prodigiosos, desorientados, prendidos con alfileres, como cualquier otro. 

Alejandro Olmedo, compilador 

Calendario de escritores, un OLIVO, 2002 2022